El Pleno del Tribunal de Ética Gubernamental (TEG) suscribió una carta compromiso del Código de Ética Institucional, el cual ya es parte de la normativa interna de la institución. La carta compromiso, será también suscrita por el resto del personal de la institución, para confirmar el cumplimiento a los principios, valores y pautas de conducta contenidos en el Código de Ética del TEG. Según afirmó el presidente del TEG, José Néstor Castaneda, esta iniciativa marca la pauta para que las demás entidades gubernamentales, también incorporen dicha normativa al interior de cada institución. “Nosotros siendo la institución que promueve la cultura de la ética en el país, debemos dar el ejemplo con este tipo de proyectos. A las Comisiones de Ética Gubernamentales (CEG) en cada institución, les exigimos buen servicio y honradez, entonces también los incentivamos a que cada una tenga su propio Código de Ética”.
Por su parte la Miembro del Pleno, Karina Burgos de Olivares, asegura que esta normativa regulatoria interna, es el resultado de un esfuerzo continuo por la mejora en el Tribunal. “La importancia de un Código de Ética propio se reitera en el contexto de la elaboración y aprobación del plan de acción del Modelo de Integridad Institucional; por lo que el Pleno acordó su formulación y, de tal manera, da cumplimiento a uno de los compromisos adquiridos por el Estado salvadoreño, al ser suscriptor de la Convención Interamericana contra la Corrupción y la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción; especialmente a aquellos mandatos que disponen la creación de medidas de prevención dentro de las instituciones públicas, destinadas a mantener y fortalecer el correcto, honorable y adecuado cumplimiento de la función pública”, expresó la Miembro del Pleno. Dicho instrumento, ha sido elaborado por un equipo de trabajo institucional con el acompañamiento técnico del Proyecto Pro-Integridad Pública de USAID. Así también, fue validado por un grupo representativo del personal del TEG. El contenido del Código está dividido en cinco capítulos en los cuales se delimitan sus objetivos, se establecen los principios valores, se define el alcance de dicha normativa, se establecen pautas de conducta para quienes conforman el Tribunal, contiene directrices sobre la imagen institucional, investidura y ambiente laboral, además de disposiciones generales sobre la difusión y cumplimiento de la normativa. Dicho instrumento, se ha puesto a disposición de la ciudadanía y de la Administración Pública, como referencia para elaborar sus propios marcos conductuales, de tal manera que se sumen mecanismos para prevenir los actos de corrupción. Puede encontrar el Código de Ética aquí.